Bares en Barcelona
Barcelona es una gran ciudad que esconde múltiples secretos a nivel gastronómico que, por suerte o por desgracia, siguen estando alejando del circuito turístico más recorrido.
Fundado en el primer cuarto del siglo XIX, el local mantiene prácticamente la misma decoración desde entonces. El paso por el establecimiento de Dalí o Picasso le da un toque bohemio y decadente que puede gustar a muchos. Su absenta es para la historia por lo que puede ser un buen sitio para comenzar el recorrido.
Se trata de la clásica bodeguita de los años setenta que tratará a tu sistema digestivo de manera contundente y sin demasiadas contemplaciones. El embutido tiene una calidad excelente, los pies de cerdo y las albóndigas son sus mejores platos. Bar idóneo para los amantes la comida tradicional.
Fundado a finales del siglo XVIII, puede ser uno de los bares tradicionales más antiguos de todo el país. A destacar su sincera y noble apuesta por la gastronomía catalana que dominan como nadie. La decoración es otro de los grandes aciertos.
Este referente entre los bares tradicionales abrió con la exposición universal del 29 y que sigue dándoles la bienvenida a cientos de clientes cada día. Ese vino blanco con gas que le da título al local lo complementan con conservas excelentes y con una cocina espectacular. Poco a poco está siendo conquistado por los turistas por lo que debes tener en cuenta que no encontrarás mesa fácilmente.
Su inicio como bodega que vendía a granel les fue ayudando a ofrecer comida a los clientes. A nivel gastronómico se pueden encontrar tapas y raciones de la gastronomía clásica española.
A medio camino entre los bares tradicionales y los restaurantes de la zona, este local es uno de los más emblemáticos de Barcelona. Siempre está lleno, nunca bajan la calidad y el servicio es excelente.
Sin lugar a dudas, uno de los mejores bares tradicionales de toda Barcelona. Primero porque no se complican la existencia ofreciendo recetas poco adecuadas. Y segundo porque ofrecen cinco tapas, unos boquerones fritos de antología, el vino en un porrón y una manera de entender este negocio que no han cambiado nunca.
Si la decoración, plagada de objetos antiguos, convierten al local en un museo, la comida es digna de exposición. Raciones generosas, comida casera y sobre todo una carta de cervezas muy amplia conforman el poder de este bar en el que también encontrarás, a ciertas horas, un buen número de turistas.
Otro de los magníficos bares tradicionales de Barcelona. La legendaria broma del camarero-pase al segundo piso si no encuentra sitio-es una de las mejores bienvenidas. A las tapas de toda la vida le han añadido una serie de delicias gastronómicas que sorprenden a todo el que se acerca a esta leyenda de Barcelona.
Es el punto de referencia para cualquiera que llegue a Barcelona y una forma distinta de entender el concepto «bares tradicionales» a pesar de ser uno de ellos y de haberse fundado en 1969. Un rosado histórico, un cava de gran calidad, embutidos y conservas excelentes y sus legendarios bocadillos conforman un todo indivisible y magnífico. La modernización del servicio y de la oferta de cavas ha sido su gran acierto.
Esperamos haberte ayudado a conocer diez nuevos bares tradicionales para que tu aperitivo o comida en Barcelona sea lo mejor posible a partir de ahora.